ESPECIALIZACIÓN INFORMÁTICA EDUCATIVA

domingo, 9 de marzo de 2014

NARRACIONES POPULARES, GRADO 6, MIL Y UNA NOCHES

Los dos que soñaron:

Cuentan los hombres dignos de fe (pero solo Alá es omnisciente y poderoso y misericordioso y no duerme) que hubo en El Cairo un hombre poseedor de riquezas, pero tan magnánimo y liberal que todas las perdió menos la casa de su padre, y que se vio forzado a trabajar para ganarse el pan. Trabajó tanto que el sueño lo rindió una noche debajo de la higuera de su jardín y vio en el sueño un hombre empapado que se sacó de la boca una moneda de oro y le dijo: “Tu fortuna está en Persia, en Isfaján; vete a buscarla”. A la madrugada siguiente se despertó y emprendió el largo viaje y afrontó los peligros de los desiertos, de las naves, de los piratas, de los idólatras, de los ríos, de las fieras y de los hombres. Llegó al fin a Isfaján, pero en el recinto de esa ciudad lo sorprendió la noche y se tendió a dormir en el patio de una mezquita. Había, junto a la mezquita, una casa, y por el Decreto de Dios Todopoderoso, una pandilla de ladrones atravesó la mezquita y se metió en la casa, y las personas que dormían se despertaron con el estruendo de los ladrones y pidieron socorro.

Los vecinos también gritaron, hasta que el capitán de los serenos de aquel distrito acudió con sus hombres y los bandoleros huyeron por la azotea. El capitán hizo registrar la mezquita y en ella dieron con el hombre de El Cairo y le menudearon tales azotes con varas de bambú que estuvo cerca de la muerte. A los dos días recobró el sentido en la cárcel. El capitán lo mandó buscar y dijo: “¿Quién eres y cuál es tu patria?”. El otro declaró: Soy de la famosa ciudad de El Cairo y mi nombre es Mohamed El Magrebí”. El capitán le preguntó: “¿Qué te trajo a Persia?” El otro optó por la verdad y le dijo: “Un hombre me ordenó en un sueño que viniera a Isfaján, porque aquí estaba mi fortuna. Ya estoy en Isfaján y veo que esa fortuna que me prometió deben ser los azotes que tan generosamente me diste”.

Ante semejantes palabras, el capitán se rió hasta descubrir las muelas del juicio y acabó por decirle:” Hombre desatinado y crédulo, tres veces he soñado con una casa en la ciudad de El Cairo en cuyo fondo hay un jardín, y en el jardín un reloj de sol y después del reloj de sol una higuera y luego de la higuera una fuente, y bajo la fuente un tesoro. Tú, sin embargo, engendro de una mula con un demonio, has ido errando de ciudad en ciudad, bajo la sola fe de un sueño. Que no te vuelva a ver en Isfaján. Toma estas monedas y vete”

El hombre las tomó y regresó a la patria. Debajo de la fuente de su jardín (que era la del sueño del capitán) desenterró el tesoro. Así Dios le dio la bendición y lo recompensó y exaltó. Dios es generoso, el Oculto.


(Las mil y una noches, adaptación de Jorge Luis Borges)

Comprensión
 
  1. Explica el significado, ajustado al contexto de: omnisciente, magnánimo, liberal, idólatras, mezquita.              
  • ¿Qué soñó Mohamed el Magrebí? ¿Qué soñó el capitán de los serenos? ¿Cómo se relacionan los dos sueños?              
     
  • ¿Qué función cumplen los ladrones en el relato?
                 
  • ¿Dónde transcurre la acción?              
     
  • ¿En qué época se sitúa el relato?

                 

Contenido
  1. En los cuentos tradicionales es habitual su intención didáctica; dan lugar a una interpretación que supone la enseñanza o moraleja que encierran estas narraciones. ¿Cómo interpretas tú este cuento? ¿Cuál o cuáles son las ideas que pretende enseñar?              
  • Determina la estructura del relato indicando el planteamiento, el nudo y el desenlace.
           
  • Según la presentación de los acontecimientos, ¿de qué tipo de narración se trata?            

Forma
  1. En el cuento aparece intercalado un diálogo. ¿Quiénes intervienen?              
  • Localiza el único adjetivo calificativo que describe la ciudad de El Cairo.
                  
  • ¿Qué información se nos da de la ciudad de Isfaján?
                  
  • Sustituye por sinónimos las palabras en negrita del siguiente fragmento del cuento:
    “[…] Trabajó tanto que el sueño lo rindió una noche debajo de la higuera de su jardín y vio en el sueño un hombre empapado que se sacó de la boca una moneda de oro y le dijo: “Tu fortuna está en Persia, en Isfaján; vete a buscarla”.

    - “[…] Trabajó tanto que el sueño lo rindió [] una noche debajo de la higuera de su jardín y vio [] en el sueño un hombre empapado [] que se sacó [] de la boca una moneda de oro y le dijo:” Tu fortuna [] está en Persia, en Isfaján; vete [] a buscarla”..


Creatividad

    • ¿Crees que los sueños pueden ser una forma de conocimiento? ¿Crees en las premoniciones? Expresa tu opinión sobre estos temas (máximo 5 líneas).

No hay comentarios:

Publicar un comentario